El tiempo que pasa entre el momento en el que el despertador suena y cuando se llega a la oficina es muy valioso. Las actividades que se hagan como las cosas que pasen, sin duda influencian el ánimo del trabajador y su disposición al trabajo. No tiene la misma actitud una persona a quien se le hizo tarde, no desayunó y se le olvidó en casa algo esencial, como la coca del almuerzo o las gafas, que alguien que tuvo tiempo de meditar, preparar su maleta e incluso poder comer en la esquina el postre que tanto le gusta antes de llegar al trabajo.

Recuerde que aunque los días puedan considerarse rutinarios, hay muchos que empiezan con el pie izquierdo y llegan con mal humor al trabajo, especialmente los lunes, lo que afecta la calidad de su trabajo e incluso su salud. La forma como se empiece el día puede definir el curso de la jornada laboral, si sigue las siguientes recomendaciones va a tener mejores opciones de empezar bien.

1. Llegue a tiempo

La impuntualidad puede arruinar un día desde el principio,  pues no solo causa mala impresión ante cualquier persona, sino que también puede cambiar los planes de trabajo, ya que hay cosas que necesitan ser realizadas en un momento específico  y no después, por lo tanto la impuntualidad puede acumular las cosas causando dolores de cabeza. “Llegar al trabajo a tiempo, o un poco más temprano, fortalece su mentalidad acerca del día y promueve sentimientos de realización” dice Lynn Taylor, autor del libro ‘Domine a su terrible tirano de oficina’, en la revista Forbes.

2. Tómese cinco minutos

Respire profundamente, tenga cinco minutos de inactividad para relajarse antes de ir al trabajo. Es una buena forma de ponerse a tono con el día, no se apresure ni se deje contagiar por el estrés de otros.  “El reto es tomar un momento para usted antes de sumergir su cabeza en el día laboral”, afirma Michael Woodward, psicólogo autor de ‘El USTED plan’.  Le recomendamos tomarse otros cinco minutos durante un momento distinto de la jornada para respirar, la clave es entender que necesita tiempo dedicado exclusivamente a usted y que esto lo puede impulsar a continuar con sus retos.

3. Comience el día desde cero

Lo ideal es que comience el día en limpio, sin deudas del día anterior, que no lo fastidie ese correo que se le olvidó enviar o esa llamada que debió hacer el día anterior. Intente que las cosas estén listas para que solo se concentre en el trabajo diario y en proyectos a mediano o largo plazo. Aunque todos los días pueden tener diferente carga laboral, nunca es bueno acumular trabajo ni dejar para mañana lo que se puede hacer hoy.

4. Organice su día

Las primeras horas del día es el mejor momento para concentrarse y trabajar en las prioridades. Pues se dispone de más energía para trabajar en cosas compleja,s que pueden requerir más tiempo y que no le gustaría hacer en la tarde mientras está bajo presión.  Michael Kerr,  coach de negocios autor del portal Humor at Work, dedicado a trabajar temas laborales, considera que las personas se distraen en las mañanas con actividades poco importantes como revisar correos o redes sociales mientras hay cosas importantes esperando ser desarrolladas.

5. Hidrátese

Al despertarse su cuerpo está más deshidratado que en el momento en que se fue a dormir, por eso es muy importante que lo primero que haga sea tomar un vaso de agua. En el libro  ‘Dieta ecológica para el cuerpo’, de la nutricionista Donna Gates, la autora sugiere que beber agua durante la mañana ayuda a librar su cuerpo de toxinas,  lo hace sentir menos hambriento y evita dolores de cabeza durante el día.

6. Haga ejercicio al menos entre 20 y 45 minutos

Los beneficios de practicar alguna actividad física no solo influyen en la salud, también pueden  ayudar a sobrellevar la vida laboral. Unas cuantas flexiones de pecho, barras en la mañana, o incluso correr en el parque, funcionan para mejorar la calidad de su día, pues al hacerlo su cuerpo libera dopamina, la cual incrementa su confianza y lo hace más productivo.

7. Realice algún acto de gratitud

De acuerdo con el portal Life Hack, ayudar a las personas ayuda a que nos sintamos bien. Por eso si usted quiere que su vida mejore,  ayude a alguien aleatoriamente al comienzo del día, por ejemplo puede darle unos pesos a alguien que lo necesite, o darle un cumplido a alguien en su oficina. También puede ofrecerle a alguien un favor sin pedir nada a cambio, estas acciones de seguro lo harán comenzar con buen humor el día.

8. Programe las cosas importantes

A pesar de que no es recomendable iniciar el día revisando el emails ni mensajes, sí es importante que los correos electrónicos se envíen al principio, esto con el fin de que los destinatarios tengan más tiempo para leerlos y contestarlos. “No hay nada más frustrante que intentar completar algo y no tener respuestas de quienes le pueden ayudar debido a que ellos están ocupados” dice Taylor en el portal de Forbes. En el caso de las llamadas busque un momento adecuado para hacerlas, es decir cuando haya más chance de que le contesten y lo atiendan.